¿Qué es el dinero? más allá de las clásicas definiciones.

El dinero es uno de los fenómenos económicos que más influye en la vida de las personas. El nacimiento es el primer acto que requiere dinero de los padres, y el sepelio el último acto que por lo general afrontan los hijos. En ese paréntesis biológico, todos se esfuerzan en obtenerlo para alcanzar bienestar, y son muchos los que dicen que su principal problema es la falta de dinero.


Sin embargo, son pocos los que se detienen a reflexionar sobre lo qué es, para qué sirve, quién lo crea, qué problemas crea su abundancia o su escasez, de qué forma el Estado lo controla, qué lo respalda . Este asunto se vuelve mas complejo cuando se habla del dinero digital y las criptomonedas, temas que actualmente ocupan las páginas económicas de los diarios, noticieros y blogs.


Por ello es indispensable reflexionar sobre este tema desde una perspectiva histórica. El dinero, así como todas las instituciones que son cotidianas en el mundo actual, como la propiedad privada, la familia y el Estado, no existieron siempre. Surgieron en determinado momento del desarrollo del homo sapiens y en la evolución de las civilizaciones que construyó, hasta llegar a nuestros días.

¿Qué es el dinero? ¿Cuál es su naturaleza?


La mayoría de definiciones del dinero indican que es todo bien o activo generalmente aceptado como medio de pago. Pero esa definición no es suficiente para comprender su esencia, cómo funciona y cómo evoluciona. Por eso mi enfoque se centra en definir su naturaleza. Aún cuando el dinero pueda tener una existencia material expresado en una moneda de oro, un trozo de papel o un asiento contable, sin embargo es ficción … asi es pura ficción.

Las ficciones, una de ellas el dinero.

El homo sapiens es la única especie que puede hablar sobre entidades que nunca ha visto, ni tocado ni olido. En otras palabras puede imaginar. El salto siguiente que dieron nuestros antepasados fue cuando no solo imaginaron cosas que no existían, sino cuando lo hicieron colectivamente, dando origen a las ficciones. El antropólogo Harari sostiene que “leyendas, mitos, dioses y religiones aparecieron por primera vez con la revolución cognitiva”.

El hombre ha sido muy prodigo en la creación de mitos y ficciones, que no quieren decir que sean falsas sino que se entraman en un relato. Por ejemplo una de las grandes preguntas que se ha hecho el sapiens en todas partes del mundo, desde sus inicios, es ¿Cómo se creó el mundo? Y es muy diferente la versión vikinga, de la inca, la musulmana o la cristiana. Pero la consecuencia inmediata de estas ficciones, es que le permitió a los hombres cooperar en gran número.

Ahora bien, los sapiens no son los únicos que colaboran y trabajan juntos, pues por citar un ejemplo, los chimpancés tambien lo hacen, pero como Harari anota, solo lo hacen con un número pequeño de individuos que conocen íntimamente. Para que funcione la cooperación y la vida común entre chimpancés, todos los miembros del grupo han de conocerse. Dos chimpancés que nunca se han visto, hayan luchado o abrazado, no sabrán si pueden confiar el uno del otro, o emprender tareas o acciones comunes.


Los hombres sin embargo cooperan con un número incontable de extraños, unidos por un mito o ficción común. Dos musulmanes de la antigua Turquía, aun cuando no se conocieran podían luchar juntos contra los Templarios católicos, porque ambos creían en Alá y en su mandato de luchar contra los infieles. De la misma forma cientos de católicos que no se conocían, sin embargo podían unirse para participar de una cruzada, porque compartían el mito común de Jesucristo el hijo de Dios hecho hombre, que murió crucificado para redimir a los hombres, y en consecuencia la necesidad de recuperar Jerusalén que había caído en poder de los musulmanes. En 2018 miles de peruanos que no se conocían previamente y se encontraron en las ciudades rusas con motivo del Mundial de Futbol, cuando se reconocían por los rasgos físicos o la camiseta puesta, se abrazaban como si se hubieran conocido de años y cantaban juntos “Contigo Perú” del Zambo Cavero, hasta terminar con lágrimas en los ojos. Esto es posible porque todos creen en la existencia de la nación peruana, en la patria peruana y en la sagrada bandera bicolor.


Harari concluye que “esta es la razón por la que los sapiens dominan el mundo, mientras que los chimpancés están encerrados en zoológicos y laboratorios de investigación”.


Es esta característica privativa de la raza humana, la que ha permitido que el hombre primitivo haya evolucionado hasta fundar ciudades con decenas de miles de habitantes e incluso imperios que gobernaban a millones de personas.


Esto fenómeno se ve con claridad en el caso de la religión acontece tambien en el tema del dinero. Es una ficción creada por el hombre, que ha hecho posible el desarrollo de la actividad económica, desde su aparición como dinero mercancía hasta la forma inmaterial que hoy tiene. Los peruanos sin excepción aceptan el intercambio de bienes por trozos de papel o transferencias digitales denominadas en soles, porque todos lo aceptan sin cuestionarlo, y en consecuencia podrá usarlo para tambien comprar bienes o servicios, saldar deudas e incluso ahorrar para gastarlo más adelante.

En última instancia, el dinero es “una convención social”, por lo cual todos lo aceptan.


El dinero peruano es “una convención social” que solo funciona dentro del Perú. Si vamos con los soles peruanos a Colombia o España difícilmente nos aceptarán nuestros billetes, porque en esos países rige otra “convención social” por la cual se acepta el peso colombiano y el euro. Y esto podemos generalizarlo para casi todos los países. Sin embargo si llevamos dólares, es probable que en la mayoría de naciones del mundo lo acepten, porque por “convención internacional” que tiene su origen en el Acuerdo de Bretton Wood en 1945 después de la Segunda Guerra Mundial, los gobiernos del mundo occidental crearon un Nuevo Sistema Monetario Internacional y aceptaron que así fuera, aunque en los últimos tiempos este hecho se viene cuestionando por el uso y abuso que han hecho los gobiernos norteamericanos respecto a la emisión de un dinero nacional pero con circulación internacional.


Finalmente imaginemos por un momento que sería de la vida y la Sociedad si no existiera el dinero. ¿Cómo se podría comparar o vender? ¿Cobrar o pagar? ¿Guardar riqueza para el futuro?

El dinero no fue inventado por una persona determinada en la evolución de la sociedad humana, sino que surgió de la necesidad del intercambio y el comercio, permitiendo la creación de una economía de mercado, cuya expresión contemporánea es el sistema en el cual vivimos.


En los próximos post haremos un recorrido desde el momento que surgió la primera forma de dinero hasta llegar a su manifestación actual, y el que se avizora con las criptomonedas y el dinero digital de las naciones como China y su “yuan digital”.